miércoles, 30 de octubre de 2019

¿Puede un cristiano celebrar Halloween?



Primeramente, me gustaría hablar del origen de esta fiesta, para llevarla desde su origen hasta lo que es hoy, y qué dice la Biblia acerca de este tema.

¿Cuál es el origen del Halloween?

Halloween es la forma de decir "All Hallows Eve", que quiere decir: "Víspera o Noche de Todos los Santos: 31 de Octubre" Muchos cristianos celebran festividades, tales como el Halloween, sin tener en cuenta su origen o verdadero significado.

El origen de Halloween se remonta a 300 a 400 años antes del Cristianismo. Era una práctica de los antiguos Druidas, que eran "sacerdotes" de los antiguos galos y británicos, esto en las Islas Británicas de los Celtas en lo que hoy se conoce como Gran Bretaña, Francia, Alemania y otros países célticos. Los sacerdotes celtas eran llamados druidas. Este pueblo fue conquistado después por los romanos. La celebración era en honor del dios Samagin, señor de los muertos. Los druidas, la noche del 31 de Octubre, llamada Samhain: "festival de la muerte" sacrificaban víctimas humanas para su dios Samhain. El 1 de Noviembre era el Año Nuevo de los Celtas.
La información acerca de los celtas y druidas proviene de Cesar y de historiadores romanos, de escritos griegos que datan aproximadamente del año 200 a.C., y de registros antiguos encontrados en Irlanda. Los escritos griegos y romanos acerca de los druidas describen extensamente sus frecuentes sacrificios humanos barbáricos. Esto es lo que dice Lewis Spence en su libro “La historia y orígenes del druidismo”. Tácito, el emperador romano, alude al hecho de que los druidas “cubrían sus altares con la sangre de los cautivos”. Si las palabras de César son dignas de crédito, los sacrificios humanos eran un elemento común y frecuente en sus prácticas religiosas.

Por el año 47 d.C., Roma finalmente derrotó a los druidas en Inglaterra y prohibió los sacrificios humanos. Los pocos druidas que quedaban se ocultaron. Actualmente un grupo creciente de personas que declaran ser descendientes directos de los druidas, aún practican su religión, incluyendo el sacrificio humano.

¿Cuándo se vuelve popular esta celebración?
En el siglo octavo el Papa Gregorio III en un esfuerzo por que la gente dejara de realizar este festival al dios de la muerte, trasladó el “Día de Todos los Santos” del 13 de mayo al 1 de noviembre. Esta celebración nunca fue una fiesta cristiana, sino una festividad católica para adorar y orarle a los santos muertos, lo cual es idolatría. Él proclamó: "Ellos ya no deberán sacrificar animales en honor al diablo, pero pueden matarlos a fin de obtener alimento para la gloria de Dios, y dar gracias al Dador de todos los dones por su provisión". El “Día de Todos los Santos” honraba a los mártires de la persecución de Roma. Pero no funcionó. Nunca sirve cristianizar una festividad pagana. Más adelante, el papa Gregorio IV decretó que ese día fuera observado por la iglesia universal (católica).

La costumbre moderna de ir de puerta en puerta para pedir alimentos y dulces se remonta al tiempo de los druidas. Ellos creían que mientras las almas pecadoras y perdidas esperaban su juicio, Samhain las liberaba en la tierra por una noche, el 31 de octubre. La gente temía a esos espíritus y creía que podían lastimarlos, y aun matarlos, si los sacrificios que les ofrecían no apaciguaban a Samhain.

La costumbre de la "dulce o travesura" la establecieron los druidas. Cuando llegaban a una casa y demandaban un niño o una virgen para sus sacrificios, la víctima era el regalo que recibían los druidas. A cambio de lo que recibían, dejaban una calabaza con ojos en la que encendían una vela hecha de grasa humana para evitar que los demonios mataran a los moradores de esa casa esa noche. Cuando alguien no podía satisfacer la demanda de los druidas, le hacían una travesura: le pintaban un símbolo en el frente de la casa, parecido a una estrella. También conjuraban una maldición que traería enfermedad y muerte a alguno de la casa durante esa noche o durante ese año.

¿Cuál debe ser mi postura como cristiano?

El pastor José Holowaty dice que nuestra principal postura es ser “imitadores de Dios”.  Efesios 5:1 dice: “Sed, pues, imitadores de Dios, como hijos amados”. ¿Puede usted imaginarse al Señor Jesucristo vestido como Satanás o como alguno de sus demonios? ¿O puede imaginarse a los apóstoles disfrazándose como adoradores del dios Moloc a quien los canaanitas, e incluso hasta los israelitas en su época tenebrosa, sacrificaban sus hijos? Halloween es un día en el cual virtualmente se glorifican todas esas cosas que Dios ha llamado abominación. Nosotros no tenemos porqué participar en ningún tipo de actividades concernientes a ese día, mucho menos en nombre de la diversión.

Algunos podrán argumentar “Pero, ¡es sólo una noche!”, “¡Es una diversión para los niños!”. Si esta es la forma como siente, entonces es necesario que entienda lo que le dice la palabra de Dios: “Así dijo Jehová: No aprendáis el camino de las naciones...” (Jer. 10:2, 2 Co. 6:14-17, 1 Co. 10:21). Jesús es Luz y según Génesis 1:4 dice la Palabra del Señor, que vio Dios que la luz era buena y la separó de las tinieblas “Porque en otro tiempo erais tinieblas, mas ahora sois luz en el Señor; andad como hijos de luz... Y no participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, sino más bien reprendedlas” (Ef. 5:8, 11) “Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder” (Mateo 5:14) Satanás y sus obras son obras de tinieblas y Halloween, con todo lo que le caracteriza, es de la oscuridad y no de la luz, debemos separarnos de ella.

La misma Biblia aclara en el pentateuco en Deuteronomio 18:10-12 “No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero, ni encantador, ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos. Porque es abominación para con Jehová cualquiera que hace estas cosas, y por estas abominaciones Jehová tu Dios echa estas naciones de delante de ti.” De modo que USTED cuando participa de esta celebración, contribuye a la propagación y práctica del culto a los muertos y al Satanismo. Sino, piense en la razón por la que se celebran cumpleaños, aniversarios, días especiales (de la madre, del padre, Navidad, etc.) ¿No es acaso en honor a alguien en especial? ¿A quién cree que rinde honor Halloween? No se deje influenciar por tales cosas extrañas y nocivas, sea usted mismo, un hijo de Dios, y apártese de eso porque ofende a Dios y Él merece todo nuestro respeto.

Después de analizar los orígenes de la fiesta, cómo se instauró en la actualidad, las atrocidades que suceden, y lo que dice la Biblia acerca de este tipo de celebraciones y de nuestra identidad como hijos de Dios ¿cree usted que un cristiano debería participar? De todas maneras, me gustaría terminar con algunas preguntas de reflexión sobre Halloween:
·         ¿Glorifica a Dios esta festividad? (1 Co. 10:31)
·         ¿Puedo ser tropiezo para otros al celebrarla? (Ro. 14:19-21)
·         Si participo, ¿Me hace pensar en “todo lo puro, etc.” al hacerlo? (Fil. 4:8)
·         ¿Doy lugar al diablo con esta celebración? (Ef. 4:27)
·         ¿Me abstengo del mal al celebrarla? (1 Te. 5:22)

Por Fabián Maturana

No hay comentarios:

Publicar un comentario